Finalmente los Otaño, Boher,
Campillo, Marigil, Morales, Berrendero, San Emeterio, Gómez del Moral,
Manzaneque, Botella, Suárez, Poblet, Geminiani, Gaul, Anquetil, Riviere,
Timoner y Bahamontes, desfilaron por la pista del Bernabéu recibiendo el
aplauso del público que acudió en gran número al estadio. El vicepresidente
madridista, José Velázquez, entrego a los dos homenajeados un reloj de oro
mientras que al resto de participantes, les hizo entrega de una insignia de oro
del club. En primer lugar se disputo una carrera de eliminación donde tras dar
13 vueltas a la pista se hizo con la victoria Poblet, a continuación
Bahamontes, Timoner, Gaul y Suárez disputaron una prueba que constó de tres
partes: vuelta cronometrada, velocidad a cuatro vueltas y persecución a cinco
vueltas obteniendo la victoria final Timoner. Poblet mas tarde derroto a Boher
en pruebas de velocidad. Riviere gano a la pareja San Emeterio-Otaño en una
prueba a cinco vueltas y meta partida, mientras que en una prueba por parejas
entre franceses y españoles, estos últimos lograron la victoria. En la prueba
final a 50 vueltas, se realizó un pequeño Tour con sprints puntuables donde el
mallorquín Timoner se llevó el último galardón en un homenaje que agrado al
público presente.

Aspecto
de la prueba ciclista homenaje a Bahamontes y Timoner en Chamartín.
En la edición de 1962
nuevamente volvió a ser escenario del paso de la Vuelta Ciclista el estadio
Santiago Bernabéu, aunque en este caso unicamente como final de etapa, en
concreto la 10ª, y no de la propia ronda. Para esta ocasión se volvió a usar un
velódromo de quita y pon pero de mayor calidad. Traído desde Valencia en cuatro
camiones, se tardó 8 horas en colocarlo para tras finalizar el evento
desmontarlo rápidamente y trasladarlo a Valladolid, donde se volvería a montar
para la siguiente etapa. El 6 de Mayo se pusieron en circulación los 71
restantes participantes que realizaron la etapa Valdepeñas-Madrid con 210
kilómetros de distancia, al término de la cual el alemán Heldermans se alzó con
la victoria en solitario tras dejar atrás a un grupo que se había destacado en
la entrada a la ciudad. Como quiera que hasta pasadas las seis no estaba
prevista la llegada de los corredores, nuevamente se pensó en realizar una
reunión ciclista desde las 16:30 para disfrute del público. Sobre una distancia
de 300 metros se vieron pruebas como el intento de récord de la pista sobre
salida lanzada, pruebas de velocidad por parejas, persecución y eliminación,
para acabar ante de la llegada del gran pelotón con una prueba individual de 50
vueltas en una reunión en la cual volvió a sobresalir Miguel Poblet.
40 años pasaron hasta que las
bicicletas volvieron a pasearse por el interior del Bernabéu. Con motivo del
Centenario madridista el club blanco solicitó y consiguió ser la meta de la
última etapa de la ronda de la 57ª edición. Con una crono reloj individual los
132 participantes recorrieron la distancia que separaba el Parque de la Warner
del estadio Santiago Bernabéu, donde en pleno terreno de juego estaba ubicada
la meta. Para llegar a ella los corredores tuvieron que entrar por la entrada
subterránea del fondo sur que enlazaba al inicio de la bajada al parking de la
Esquina del Bernabéu con el córner del campo. Los apenas 40 kilómetros dieron
bastante juego ya que el líder hasta ese momento, Roberto Heras, sucumbió ante
el empuje de Aitor González que dio la vuelta a la desventaja que tenía para
hacerse con el triunfo final de la ronda. En lo más alto del pódium el vencedor
recibió por parte de Florentino Pérez una camiseta con su nombre en la trasera
y el dorsal número 1.

Final Vuelta a España 2002
Baloncesto
Casi 20.000 personas se
acercaron al Santiago Bernabéu la noche del 19 de Junio de 1956. Un cantidad
muy baja si del equipo de futbol del Real Madrid se tratara, máxime cuando 6
días antes había obtenido su primera Copa de Europa en París, pero sin embargo
una cifra espectacular para asistir a un partido de baloncesto en un recinto
que aún no tenía la instalación eléctrica que permitiría partidos nocturnos a
partir de Mayo de 1957. Sin embargo la novedad de ver a los Harlem
Globetrotters en el coliseo blanco, animo a la gente a desplazarse al estadio.
No era la primera vez que el equipo norteamericano visitaba Madrid, dado que
habían actuado en la Plaza de Las Ventas unos años antes. En esta ocasión se
acondiciono parte del césped, sobre el cual se colocó una pista de madera, y se
dotó al estadio de un área convenientemente iluminada por la misma firma que un
año después realizaría la instalación eléctrica general de todo el estadio para
poder disputar partidos de futbol nocturnos. Como encuentro se organizó un
partido entre los Globetrotters contra los Texas Cowboys. En la previa del
partido la plantilla del Real Madrid fue homenajeada recibiendo un balón
firmado por los integrantes de los Globetrotters. Tras el saque inicial a
cargo del embajador estadounidense los Harlem derrotaron a los Texas por 61-53.
Como era norma habitual durante aquellos años en sus actuaciones, junto a los
jugadores les acompaño toda una troupe circense de malabaristas, acróbatas,
equilibristas con monociclos, etc. que amenizaron el espectáculo.

(MARCA)
La segunda aparición del
conjunto norteamericano acaeció los días 22 y 23 de Agosto de 1959. En sesión
nocturna de las 23:00 con las luces de un estadio que ya disponía de
alimentación eléctrica, nuevamente se enfrentaron los Harlem contra esta vez
los San Francisco College, o como se anunciaba en la prensa de la época: Los
Chinos de San Francisco. Como de costumbre el espectáculo no estuvo unicamente
prestado por los baloncestistas, sino que durante el intermedio se vieron
artistas sobre el monociclo, equilibristas, tenis de mesa, un hombre de goma y
otras atracciones para el deleite de los presentes. Para la estadística reseñar
las dos victorias de los Globetrotters por 68-54 y 63-43. Como curiosidad para
los lectores, en 1963 volvieron a visitar Madrid dentro de una nueva gira los
Harlem, enfrentándose esta vez al propio Real Madrid aunque siendo el escenario
el Pabellón de los Deportes por lo que no entraremos mucho en detalle, salvo
para reseñar que el triangular entre los Harlem, New York General y el Real
Madrid, se saldó con victoria en el torneo de los primeros aunque los
madridistas lograron vencer en el duelo directo a los Globetrotters.
Béisbol
Dentro de la castellanización
de los nombres en la época franquista, el por aquel entonces llamado “Pelota
Base”, también pudo disfrutarse en el césped de Chamartín varias veces y con
motivo del torneo nacional más importante: la Copa del Generalísimo. La primera
vez fue en Julio de 1948, cuando la Federación decidió que la fase final del
torneo se jugara en Madrid, disputándose las semifinales en Chamartín y la
final en el estadio Metropolitano. A ella acudieron Real Madrid, Atlético
de Madrid, Barcelona y Español, por lo cual se decidió un doble enfrenamiento
entre madrileños y catalanes. En la primera jornada el Madrid derroto 7-5 al
Barcelona en un partido pleno de errores por ambos conjuntos que llevo la
incertidumbre del marcador hasta las últimas entradas, mientras que en la
segunda eliminatoria el Atleti derroto 6-5 al Español. Al día siguiente se jugó
la segunda jornada alterando el orden de los partidos. El Español igualó la
eliminatoria derrotando a los rojiblancos por 9-6, mientras que el Madrid
apabulló al Barsa por 16-7, clasificándose para la final. En la tercera jornada
se volvieron a enfrentar madridistas y culés, pero como partido amistoso puesto
que el Madrid ya estaba clasificado para la final. Con apenas 7 entradas
disputadas, los blancos volvieron a vencer nuevamente por 13-3. Posteriormente
se jugó el encuentro decisivo entre rojiblancos y pericos, donde los madrileños
volvieron a vencer por 6-4, alcanzado la final. En ella, disputada en el
Metropolitano, el Madrid se convirtió en Campeón de España al derrotar a los
colchoneros por 12-6 y 10-6 en ambos partidos.

El madridista Barrios golpea durante unos de los
encuentros de semifinales.
(MARCA Grafico)
Para Julio de 1950 la
Federación dictamino nuevamente que la fase final del Campeonato de España se
jugara en Madrid. A ella llegaron los dos primeros equipos clasificados de
Madrid y Cataluña. Por la capital lo hicieron el Real Madrid y el Atlético de
Madrid, sin embargo estos últimos tuvieron que renunciar puesto que adujeron
que la mayoría de sus jugadores se encontraban fuera de España disfrutando del
periodo vacacional, lo que motivo que el segundo representante capitalino fuera
el Estrella, que había quedado en tercera posición en el Campeonato Regional.
Resulta curioso, a diferencia de hoy en día, que el actual Campeón de Castilla
y España renunciara a participar por dicho motivo. Desde la Ciudad Condal los
representantes que acudieron fueron el Barcelona y el Hércules. El sorteo
deparó por un lado la eliminatoria entre el Hércules y el Estrella, mientras
que culés y madridistas lo harían en la otra semifinal, ambas eliminatorias al
mejor de tres partidos.
Los dos primeros partidos, en
sesión de tarde a las 3 y a las 6 se saldaron ambos con victorias catalanas: el
Hércules derroto 18-7 al Estrella con gran facilidad mientras que los
barcelonistas lo hicieron por 9-11 con arreón final en la 8ª entrada que dio la
vuelta al marcador para los culés. Al día siguiente en sesión matinal, a las 9
y a las 11, el Hércules volvió a ganar con contundencia, 26-6, al Estrella por
lo que se clasificaba para la final. Mientras tanto el Real Madrid devolvió la
moneda al Barcelona derrotándole por 11-9. Al llevar cada uno una victoria se
tuvo que jugar un partido de desempate, en el cual comenzó con ventaja de 4
carreras el Barcelona pero con un Madrid que a partir de la 3ª entrada empezó a
recortar para colocarse a falta de 3 entradas con un parcial de 15-4. El
Barcelona no logro remontar la diferencia del parcial y acabo perdiendo por
15-10. 4 días más tarde se veían en la final en Chamartín el Real Madrid y el
Hércules. En el primer partido la igualdad llego hasta la última entrada, donde
tras batear el Hércules empató a 10, con lo cual dejaba la victoria en manos
blancas. Éstos no fallaron e hicieron una carrera para conseguir la victoria en
el primer partido. En el segundo partido el Hércules se resistió a entregar el
título y forzó el partido de desempate ganando 5-7 en Chamartín. En el partido
decisivo, con cerca de 5.000 personas en las gradas del estadio, el Hércules se
puso con un 6-0 en la primera entrada. Pese a eso el Madrid fue de menos a más
y consiguió darle la vuelta al partido para acabar venciendo por 15-10 y
obteniendo el título de Campeón de España. Como curiosidad destacar que el home
de bateo estuvo colocado en el córner del fondo sur con Castellana, zona en la
que estaba colocado el público.

Los jugadores madridistas descansan bajo la zona de
preferencia de las gradas de Chamartín durante las finales.
No solo el Real Madrid, o el
eterno rival, jugaron al Béisbol en Chamartín. A finales de Julio de 1952 el
recinto madridista fue objeto de un partido de exhibición entre la selección de
Castilla y Los Rockets. Estos eran una selección de militares americanos
destinados en las bases alemanas en la región de Rin-Meno, y que el año
anterior ya habían estado de gira por España para enfrentarse ante la selección
Castellana en el antiguo Metropolitano. En esta nueva visita se decidió que el
partido se jugara en Chamartín donde la selección Castellana estuvo
representada por jugadores del Real Madrid, Atlético de Madrid, Piratas y el
Club Puerto Rico. A las 17.30, y tras el lanzamiento de la primera bola por el
embajador estadounidense en Madrid, dio comienzo el encuentro. Los americanos
lograron cierta distancia en las primeras entradas colocándose con un 0-4
parcial, sin embargo las castellanos no cejaron en su empeño y con una buena
última entrada lograron poner un 3-4 en el marcador que a la postre fue el
resultado final. La gira de los Rockets siguió por Madrid con una exhibición y
enseñanza en el Campo de Vallehermoso para jugadores juveniles de la capital,
un partido en el Metropolitano ante el Atlético de Madrid con victoria foránea
por 7-18 y un último amistoso en San Lorenzo del Escorial, donde derrotaron
nuevamente a la selección Castellana por 7-14.

La selección de Castilla posa sobre el césped del
Bernabéu con la bandera estadounidense.
(MARCA Grafico)
Boxeo
Otro de los deportes que más
tirón tuvo el siglo pasado durante varias décadas en Madrid fue el Boxeo.
Alejado actualmente de las primeras páginas de la prensa deportiva, a excepción
de la aparición de algún boxeador nacional en puertas de algún cinturón de
campeón, tuvo espacio en Chamartín para disputar varias veladas en la década de
los 50.
En Junio de 1950 el recinto
madridista se preparó para albergar una velada Hispano-Italiana. Con precios
populares (3 pesetas las señoras, 5 los socios madridistas, 8 el público
general y sillas de pista a partir de 15 pesetas), se organizó un triple
combate. Ubicado el ring sobre el centro del césped del estadio, el evento
congregó a más de 40.000 espectadores que dieron fe del éxito de esta
primera velada pugilista en tan novel recinto. Como antesala se programó a las
6 de la tarde un combate entre el madrileño Pedro Antonio Jiménez y el
valenciano Natal, que se saldó con la victoria del primero a los puntos. Tras
este llego la gran velada internacional en la cual los 6 boxeadores hicieron su
aparición sobre el escenario de las 16 cuerdas, donde se formalizaron las
presentaciones al público y los capitanes de ambos equipos intercambiaron
banderines. Como primer combate a diez asaltos se enfrentaron el italiano
Carlo Mola y el español Antonio Monzón, campeón nacional del peso welter. El
combate no llego a su finalización, puesto que el italiano fue descalificado
por continuas incorrecciones a partir de la mitad del combate. En segunda
instancia saltaron al ring Danilo Passotti y Luis De Santiago, campeón del peso
pluma. La diferencia de calidad entre ambos púgiles se vio de inmediato y la
balanza hacia el español se decantó rápidamente, convirtiéndose poco a poco en
soporífero hasta que el italiano sufrió en un golpe en la mano en el sexto
asalto, pidiendo de inmediato el abandono. Como de costumbre para el cierre de
la velada se dejó el mejor combate: el campeón continental de los pesos gallo,
Luis Romero, contra el campeón italiano de la misma categoría, Amieto
Falcinelli. De la triple velada fue el único combate que se llegó al final del
mismo, donde el púgil español fue imponiendo poco a poco su mayor técnica hasta
hacerse vencedor del combate a los puntos, en un resultado avalado por lo visto
en el cuadrilátero. Tras este último combate el secretario de la Federación
entrego al capitán español de la velada, Romero, el trofeo al equipo español
como vencedor de la velada.

La portada de MARCA refleja un Chamartín lleno para
asistir a la velada pugilística.
Pese a ser de gran éxito la
afluencia, no tanto la calidad de la velada, el recinto madridista tuvo que
pasar cuatro años para recibir nuevamente boxeadores. El club cedía el Frontón
Fiesta Alegre a la Federación para estos eventos, pero llegado el calor quiso
organizar nuevamente en el estadio diversos sesiones al aire libre, para un
público que estaba acostumbrado en estas fechas a la Plaza de Toros de Las
Ventas o las veladas en el Campo del Gas. En el estío de 1954, Chamartín volvió
a ser escenario los domingos por la tarde de varios veladas en las cuales el
cuadrilátero se ubicaba cerca del lateral de Castellana, donde estaba ubicado
el antiguo palco, para aprovechar la luz solar y que el público pudiera asistir
desde las localidades de sombra. Durante casi un mes, entre mediados de julio y
hasta que el balompié reclamó su campo, se pudieron ver por Chamartín a grandes
figuras de la escena española: Luis de Santiago, Javier Ortiz, Young Martínez,
González Incera, etc.. En los 24 combates que se disputaron en las 4
veladas hubo de todo como en botica: combates buenos, malos, protestas del
público por peleas con escaso ímpetu e incluso anécdotas como el puñetazo que
lanzo Al Young a José Guillén que acabo con este despedido fuera del
cuadrilátero. Pese a los precios populares la afluencia fue más baja en
comparación a la velada de 1950, pero aun así en la última sesión que congrego
otro encuentro Hispano-Italiano, cerca de 20.000 espectadores asistieron a la
velada que cerraba la temporada veraniega en Chamartín.

Entrada para una velada de Boxeo en el Estadio de
Chamartín.
Balonmano
También llamado en aquellos
años “balón a mano”, por extraño que parezca este deporte también se jugó sobre
el césped del Santiago Bernabéu, en este caso sin tarima de madera ni
similares, sino sobre la misma hierba. En Junio de 1950, un día antes de
la velada pugilista Hispano-Italia, el Real Madrid ejerció de anfitrión para
enfrentarse al conjunto alemán del Saarlouis. Éstos, invitados por la
Federación Española, llegaron a Madrid desde San Sebastián para jugar sendos
partidos ante el Real Madrid y el Atleti. Viajando en el tren nocturno y pese a
llegar a primera hora de la mañana, no fue impedimento para que a las seis y
media de la tarde saltaran al césped de un Chamartín en el cual apenas había
público. En modalidad de 11 jugadores, el equipo de El Sarre fue claramente
superior al madridista finalizando la primer parte con victoria parcial de 2-8,
dado que los madridistas no llegaron a ser un conjunto como tal en ningún
momento. En la segunda parte, con varios cambios en los locales, el resultado
se vio maquillado al recortar los blancos y finalizar perdiendo por 8-12. Al
día siguiente el Saarlouis jugo en otro campo de futbol, en este caso el
Metropolitano del Atlético de Madrid, al cual derrotó por 9-12 antes de
retornar a su país.
También el Balonmano tuvo su
aparición durante las celebraciones de las Bodas de Oro del conjunto blanco. El
rival elegido fue el equipo francés del París Universite Club el cual se
enfrentó a los blancos en las modalidades de a 7 jugadores y a 11. El partido
de 7 jugadores se celebró en el Frontón Fiesta Alegre, ubicación de la sede
oficial madridista en la cual se realizaban todo tipo de encuentros de las
distintas secciones del club, mientras que el partido a 11 se decidió jugar al
aire libre en Chamartín. Con dos días de diferencia se disputó el doble envite.
En el Frontón los blancos vencieron por 10-3 mientras que el partido de
Chamartín fue más accidentado. Las lluvias que habían caído sobre Madrid habían
dejado tocado el césped del estadio, teniendo varias zonas del mismo en mal
estado. La mala táctica madridista, que abuso del bote del balón, estando la
hierba perjudicada como estaba, en contraposición con la gran cantidad de pases
de los franceses, se vio reflejado en el descanso con 1-5 para los franceses.
Para colmo durante el intervalo se disputaron diversas pruebas de Atletismo en
el estadio, lo que motivo que el césped fuera más castigado y teniendo que
jugarse esa misma tarde más partidos de futbol del Torneo, se decidió cancelar
la segunda parte del partido de balonmano dando como vencedor del mismo al
conjunto francés.
En Junio de 1954, aprovechando
un amistoso entre el Real Madrid y el Athletic de Bilbao con el cual se
inauguraba el fin de las obras del tercer anfiteatro, el popular “gallinero”,
se jugó en las actividades previas a la inauguración un partido de balonmano
entre el Real Madrid y la selección castellana. Ante un estadio lleno, el
conjunto visitante derroto a los madridistas por 1-2.
Imagen sin datar de un encuentro de balonmano a
once en el césped de Chamartín.
Atletismo
La vieja sección de Atletismo
no quiso ser menos y también pudo disfrutar del césped del Bernabéu. En
concreto durante las celebraciones de las Bodas de Oro en 1952, cuando a
finales de Marzo se disputaron diversas pruebas en el intermedio del partido de
Balonmano a 11 programado aquella jornada. Primero se disputó una prueba de 80
metros lisos donde venció Francisco Tuduri del equipo del Ministerio del
Ejército. Posteriormente se disputó la prueba de 3000 metros la cual tuvo un final
emocionante cuando el representante madridista, Amorós, logro adelantar en la
última prueba a Quesada, representante del RCD Español, obteniendo la victoria
en la prueba con un tiempo de 9 minutos y 37 segundos, con apenas un cuerpo de
ventaja sobre el catalán, entrando posteriormente en la meta Losada, Macías,
Yebra, Rojo y Martín. Para terminar el evento se realizó una prueba de relevos
entre integrantes de la sección de Atletismo del Real Madrid y el equipo del
Ministerio del Ejército, resultando vencedor el cuarteto blanco que corrió
aquella mañana con Revert, Cortazar, Alvargonzález y Zulueta.

Quesada es seguido por Amorós durante uno de las
vueltas al césped.
(MARCA Grafico)
Fútbol Americano
Si el Real Madrid ha jugado en
sus visitas a EEUU en recintos estadounidenses donde se practica el fútbol
americano, este no ha sido menos y también jugó un partido en el recinto
madridista. En el lejano noviembre de 1958 fue la fecha elegida para albergar
dicho encuentro. Apenas un mes antes había tenido el primer enfrentamiento de
este deporte en suelo español, en concreto en la Base Aérea de Torrejón donde
dos equipos de militares de bases americanas en Francia y Marruecos se habían
enfrentado aunque no en un partido abierto al público, sino solo a personal y
familiares de la propia base. Como era de esperar para el primer partido con
público se pensó usar el Santiago Bernabéu dada su capacidad, y se decidió
aprovechar el tirón de un Real Madrid – Valencia de Liga para jugar a
continuación el partido.
Los equipos elegidos fueron
los de las bases de Toul en Francia, vestidos de azul, y Giebelstadt en
Alemania, vestidos de blanco, que jugaban ambos dentro de las diversas ligas
que tenían el ejército americano, en las diferentes bases europeas establecidas
en el viejo continente tras la II Guerra Mundial. Tras finalizar el Real Madrid
3 – Valencia 0, y sin que apenas hubieran llegado al vestuario los jugadores,
ya estaban los operarios pintando las nuevas lineas de demarcación así como los
jugadores calentado en el césped. En la previa del partido, el General
Ernest C. Hardin Jr., subcomandante de la XVI Fuerza Aérea en la Base Aérea de
Torrejón, hizo entrega a Santiago Bernabéu de un trofeo con forma de balón
ovalado al mismo tiempo que dedicó unas palabras al público presente. Como
quiera que el público en su gran mayoría era ignoto sobre las normas de este
deporte, se repartieron en el estadio octavillas con las reglas más
importantes. Aderezado el espectáculo con la actuación de la banda militar de
las Fuerzas Aéreas norteamericanas, que también había actuado en el descanso
del partido entre madridistas y valencianos, el público se quedó en su
totalidad a presenciar un espectáculo inédito el cual tuvo bastante movimiento
en la primera parte, al término de la cual vencían los “alemanes” a los
“franceses” por 26-6. Como quiera que la noche empezaba a acercarse, el partido
había empezado a las 6, o bien el deporte no era de su interés, poco a poco una
parte del público fue desfilando durante la segunda mitad. Esta resulto menos
ajetreada en el marcador para finalizar con el idéntico resultado del descanso,
la presentación oficial del futbol americano en nuestro país.

(Boletín Oficial del Real Madrid)
Golf
Aprovechando la victoria de
Severiano Ballesteros en el Masters de Augusta de 1983, la segunda en su
carrera, apenas una semana después del triunfo la Federación Española de Golf
organiza una exhibición del cántabro en el estadio Santiago Bernabéu. El plato
fuerte de la misma era comprobar si el golfista podría lanzar una bola desde el
exterior del estadio y colocarla dentro del estadio. Patrocinado por Cepsa, el
cántabro deleito al público presente en el estadio, alrededor de 4.000 personas
incluyendo a bastantes jugadores de la primera plantilla del Real Madrid y el
alcalde de Madrid, Tierno Galván, con el lanzamiento de portería a portería con
diversos efectos, golpes de rodillas, golpear con la pelota desde el césped una
zona determinada de una lona publicitaria ubicada en el primer anfiteatro,
malabarismos golpeando la bola una y otra vez con el palo de golf, etc. hasta
llegar a la prueba final que consistía en introducir la pelota desde fuera del
estadio, salvando los 22 metros de altura de las gradas para depositar la
pelota en el círculo central del césped de Chamartín.

28 años tendrían
que pasar para que el golfista Gonzalo Fernández Castaño emulara a Ballesteros
con una exhibición similar. En Junio de 2011, dentro de la campaña de promoción
‘El Golf sale a la Calle’ realizada por la Real Federación Española de Golf, el
madrileño volvió a golpear una pelota desde una acera situada a 150 metros del
estadio para intentar sortear los 45 metros de altura, recordemos que la
reforma de comienzos de los 90 en el estadio, para alojar nuevamente la pelota
en el césped del estadio. Tras lograrlo, volvió a realizar una exhibición
dentro del estadio como hiciera Seve en 1983.
Religión
También las creencias
católicas tuvieron su participación en el Santiago Bernabéu varias veces
durante estas décadas. Para la inauguración del estadio, en la mañana del
14 de Diciembre de 1947, se realizó en el estadio, concretamente en el palco de
autoridades, la bendición del mismo y una misa solemne oficiada por el padre
Luis Soria, que era socio madridista. Al evento asistió el presidente de la
Federación Nacional de Fútbol, el presidente del Atlético de Madrid y la Junta
Directiva al completo del Real Madrid, que estuvo respaldada por una buena
cantidad de socios y compromisarios. Con motivo de las Bodas de Oro del Real
Madrid nuevamente se realizó una misa de campaña dentro del estadio a finales
de marzo de 1952. En este caso se realizó debajo de la antigua torre del
marcador, que se ubicaba en el lateral de Padre Damián cuando aún no existían
los anfiteatros superiores. A la misma asistió la Junta Directiva al
completo junto a numerosos socios que hicieron de anfitriones a la Directiva
del Atlético de Madrid que acompaño a los blancos en el evento con su
presidente Cesáreo Galíndez a la cabeza. Posteriormente se aprovechó el acto para
inaugurar el nuevo gimnasio del estadio, ubicado bajo las tribunas del estadio,
y que en ese momento era de los más modernos de la capital.
Apenas 4 años después, en
puertas de la Festividad de San Isidro de 1956, el Santiago Bernabéu fue
escenario de un homenaje nacional a Su Santidad el Papa Pio XII. Pese a que el
estadio aun no tenía la instalación eléctrica necesaria para jugar partidos
nocturnos, se colocaron cerca de 200 reflectores y cerca de 2.000 bombillas
conectadas en una red eléctrica que estaba alimentada por un transformador de
250 kilovatios de potencia. La iluminación fue exitosa y se realizó una
demostración religiosa que lleno el estadio en aquella noche. En el círculo
central del estadio se ubicado un altar con una cruz blanca al cual flanqueaban
sendos escudos de España y el Vaticano. En el tercer anfiteatro, en el popular
gallinero, se coloca una gran figura iluminada representando al Santo Padre.
Tras diversos parlamentos y panegíricos, se leyó una carta del Papa al pueblo
español al término de la cual se celebró una misa en la cual comulgaron cerca
de 20.000 personas. Finalmente de madrugada se dio término al acto religioso.

Sin embargo el evento
religioso más conocido en el Santiago Bernabéu fue la visita de S.S. Juan Pablo
II en 1982. Dentro de una visita de 10 días a España entre Octubre y Noviembre
de ese año, su santidad celebró en el recinto blanco una reunión con la
juventud española la cual desbordo previsiones y llenó no solo el estadio, sino
las inmediaciones del mismo donde gran cantidad de personas tuvieron que
quedarse fuera ante la imposibilidad física de entrar al recinto, teniendo que
optar por ver el evento a través de un gran pantalla ubicada en la Plaza de
Lima anexa al estadio. El césped del estadio se tapó en gran parte para colocar
una serie de atriles con un gran escenario central desde donde Su Santidad se
dirigió al público presente, que en una buena parte lo vio desde el propio
césped en zonas habilitadas para ello.
Lleno en el estadio y el público ubicándose en
cualquier lugar para poder asistir a la visita de Juan Pablo II.
(Agencia EFE)
Política
Raimundo Saporta, vicepresidente madridista y mano
derecha de Santiago Bernabéu, dijo en su día: “El Real Madrid es y ha sido
político. Ha sido siempre tan poderoso por estar al servicio de la columna
vertebral del Estado. Cuando se fundó en 1902 respetaba a Alfonso XIII, en el
31 a la República, en el 39 al Generalísimo y ahora respeta a Su Majestad Juan
Carlos, porque es un club disciplinado y acata con lealtad a la institución que
dirige la nación.” Teniendo en cuenta la frase de Saporta no
es raro que el estadio se cediera para dos eventos políticos que tuvieron lugar
en el Estadio durante los años de la Dictadura.
En Octubre de 1953 y para
conmemorar los XX años de la Fundación de la Falange en el Teatro de la Comedia
de Madrid, se realizaron una serie de eventos en la capital, que tuvieron como
colofón una gran reunión a la cual asistirían miles de falangistas llegados de
toda las partes de España. Como escenario se eligió el estadio de Chamartín,
dada su gran capacidad de aforo. Las 3 grandes estaciones de tren de Madrid:
Norte, Delicias y Mediodía, junto a las carreteras nacionales, fueron la puerta
de entrada a los cerca de 150.000 personas, siempre según las crónicas de la
época, que llegaron a la capital para asistir a los actos. Para que el evento
tuviera más éxito, se concedieron vacaciones escolares en todas las edades.
Pese a que la misa de campaña, con la cual comenzaba el acto, empezaba a las
11:00 de la mañana, desde las 8 ya estaban los alrededores llenos de gente
esperando el comienzo. Con un estadio engalanado de banderas rojigualdas y
carteles con lemas a favor de Franco y el tradicional “Arriba España”, dio
comienzo el evento. En el lateral de la carretera de Maudes, actual Padre
Damián, se levantaron una serie de tribunas desde las cuales se darían los
discursos oficiales, donde en el central haría su aparición el Jefe del Estado,
Francisco Franco. Al pie de la misma se ubicaba el altar desde donde se
ofrecería antes la Misa de Campaña a los presentes. Pasada la media mañana fue
el acto central con el discurso del Generalísimo, pivote sobre el cual versaba
realmente todo el evento. Tras finalizar el mismo y los aplausos, vivas y caras
al sol de rigor, una riada de gente retornó Castellana abajo para volver la
mayoría de ellos a sus localidades de origen.

Un Chamartín lleno para asistir al acto central del
XX de la Falange.
Sin embargo el gran acto
político y recurrente que tuvo lugar cada año en el Santiago Bernabéu, fueron
las conocidas como Demostraciones sindicales. Estas tuvieron lugar de manera
anual entre 1958 y 1975, a excepción de 1960 que tuvo lugar en el Camp Nou, y
siempre con el telón de fondo del 1º de Mayo que en los años de la Dictadura
tuvo un significado distinto, ya que la llamada Fiesta del Trabajo estuvo
prohibido desde la Guerra Civil para a mediados de los años 50 cambiar dicha
celebración por otra de corte más religioso con la cual se festejaba a San
José, patrón de los trabajadores, en la popularmente llamada Festividad de San
José Obrero. Estas demostraciones sindicales giraban en torno a espectáculo
deportivos, gimnásticos, musicales y de folclore popular en los cuales los
trabajadores hacían diversas exhibiciones en el césped del Santiago Bernabéu,
al cual solían asistir bastante público en estas jornadas festivas y eran
ampliamente difundidas por los medios oficiales. Organizadas por Educación y Descanso,
una organización dependiente de la Organización Sindical Española, el gran
objetivo de esas celebraciones era mostrar el apoyo de los trabajadores al
régimen existente.
En 1958 fue la primera vez que
se organizó el evento, aunque en realidad fue el cierre de los I Juegos
Deportivos Sindicales que se habían disputado en Madrid durante el mes de
Abril. El colofón de aquellos Juegos fueron una demostración deportiva en el
estadio, en la cual participaron cerca de 10.000 atletas ante un público que
llenó el estadio. Como quiera que fue un éxito de público y participación, el
régimen vio en estas celebraciones otra gran forma de propaganda y los primeros
años se alternaron espectáculos de coros y danzas, con las clausuras de los
Juegos Sindicales de 1961 o con homenajes teatrales como el de 1962 a Lope de
Vega. Con el paso de los años la asistencia fue disminuyendo poco a poco, y el
evento dejo de realizarse a la muerte del dictador.
VIII Demostración Sindical en Mayo de 1963
Conciertos
A partir de la década de los
80 el Santiago Bernabéu comenzó a ser escenario de grandes conciertos. En
Septiembre de 1983, el cantante Julio Iglesias evoco sus comienzos como portero
madridista en las categorías inferiores, retornando a Chamartín para un gran
concierto que reunió a casi 100.000 personas, incluyendo varios miembros de la
Familia Real. En Junio de 1985 será el cantante Raphael el que irá un poco más
allá celebrando un concierto gratuito para conmemorar sus XXV años en los
escenarios. Huelga decir que el lleno fue hasta la bandera. El que se quedó muy
lejos del lleno, y estuvo cerca del fracaso debido en gran parte por los
precios de las localidades, fue la gran estrella norteamericana Frank Sinatra.
El de Nueva Jersey visito el Bernabéu en Septiembre de 1986 sin tener el éxito
de público deseado. En Julio de 1987 nuevamente se volvió a colapsar Chamartín,
sobrepasando el límite de público de tal manera que se tuvo que cerrar la
mayoría de las puertas con candado. La aparición de dos grandes grupos que
hacían debut en España, Pretenders y U-2, junto a los teloneros Big Audio
Dynamite y UB-40, fueron los grandes culpables de aquella histórica noche.

Lleno hasta la bandera en el histórico concierto de
U2.
Pese al éxito de la mayoría de
los conciertos, el césped acababa muy tocado y dado que no se cambiaba con
tanta frecuencia como hoy en día, el estadio tuvo una ausencia de varios años
sin recibir cantantes, al menos sobre un escenario. Con la llegada del nuevo
siglo se volvió a usar el estadio para diversos conciertos y con el paso de los
años desde artistas nacionales, como varias hornadas de integrantes de
Operación Triunfo, hasta grandes artistas internacionales, como Bruce
Springsteen, The Rolling Stones o Plácido Domingo, volvieron a llenar el
recinto madridista.
Varios
Ademas de todos los eventos
reflejados también han tenido lugar otros de menor calado y de los cuales
apenas se mencionaron en las páginas de la prensa pero los cuales vamos a
recordar brevemente.
En las fiestas patronales de San
Isidro de 1959 patrocinado por el Ayuntamiento de la Villa y organizado por el
Real Madrid tuvo lugar un concurso de aeromodelismo en el estadio. Con la
presencia de varios equipos tanto nacionales como internacionales, se
disputaron varios pruebas de distintas especialidades tales como vuelo
circular, carreras, acrobacias, etc. Durante el descanso del Real Madrid –
Glasgow Rangers correspondiente a la eliminatoria de la Copa de Europa 63-64,
tuvo lugar una actuación de la Banda Municipal de la Policía Urbana de Madrid,
la cual deleito durante el intervalo al público presente con varias
composiciones.
A mediados de Enero de 1982
tuvo lugar en Madrid el sorteo de los grupos de la fase final del Mundial de
España 82. Dado que el evento se realizó en el Palacio de Congresos situada en
la Castellana, al otro lado del Bernabéu, se aprovechó el mismo día para
inaugurar la pasarela que conectaba el Palacio, que sería el centro de prensa,
con el propio estadio. Asimismo, dada la presencia de todas las personalidades
en Madrid, se presentó el plan de seguridad del Mundial el cual en un alarde de
originalidad se denominó “Plan Naranja 82”. El césped del Bernabéu se llenó de
personal y medios para la presentación a la prensa y personalidades, por lo
cual se pudo ver varios helicópteros y ambulancias, así como los integrantes de
Protección Civil, Bomberos, sanitarios, voluntarios, etc…

En la primavera de
1984 el tenor Plácido Domingo, que años más tarde cantaría el himno oficial del
centenario madridista, grabo para la televisión norteamericana un especial en
el estadio que se emitiría la víspera de la inauguración de los Juegos
Olímpicos de Los Ángeles, donde unía el deporte y la música. Nuevamente un
helicóptero sobrevoló el interior del estadio y se posó en el césped para
grabar al tenor.
Boletín Oficial del Real Madrid.
En el actual siglo los eventos
han sido más selectivos aunque si bien es cierto que en los últimos años el uso
del césped ha estado reservado mayoritariamente para el futbol, el final de las
últimas temporadas ha derivado en un continuo desfile de actos de todo tipo al
aprovecharse esas fechas para cambiar el césped del estadio y ya no tener que
preocuparse por como sufría el mismo. Desde la entrega de diplomas a los
graduados en la Universidad Europea, a partidos de aficionados derivados de
eventos publicitarios de patrocinadores del club, a cócteles sobre el césped,
han sido tónica más habitual en estos años.
Con esto finalizamos el
resumen de estos 70 años en los cuales, además del balón sobre el césped, el
estadio ha sido testigo de la evolución de este país a través de todo tipo de
eventos. Aunque se ha querido dar mayor contexto y amplitud a los eventos más
lejanos en el tiempo, queda abierto a que el lector pueda reseñar cualquier
aclaración, ausencia, error u omisión que detecte en el texto, para intentar
completar en mayor medida este reportaje.