martes, 13 de agosto de 2019


LA ESCULTURA GÓTICA




Queridos lectores, como siempre me gusta poner datos de interés, ahora toca a la escultura Gótica en su transición del Románico al Gótico, espero sea de vuestro agrado y como siempre aprendaís un poco. También servirá para los que estudian este tema o este periodo. Gracias de antemano a todos/as.

Características estéticas.
En general podemos decir que muchas cosas han cambiado con respecto a la escultura románica, ha cambiado la visión del mundo de la cual es un fiel reflejo la escultura gótica. El decir que muchas cosas han cambiado no quita para que otras muchas se conserven, de hecho en muchos aspectos la escultura gótica es la evolución de la románica sin la cual no hubiera surgido y así a la hora de su estudio es inevitable la comparación de los dos estilos medievales ya citados.

A) El naturalismo.

Si la escultura románica se caracterizaba fundamentalmente por su antinaturalismo, es decir, por las representaciones alejadas de la realidad, en el Gótico se busca todo lo contrario y la escultura es tremendamente naturalista. Pero dentro del naturalismo podemos ver dos vertientes, el naturalismo que copia las cosas con un realismo total y el que intenta superar la realidad embelleciéndola, pues bien, ese naturalismo idealizado es una de las características más importantes de la escultura en este periodo. El naturalismo gótico hace que a la hora de representar los pliegues de un vestido estos no aparezcan de una manera geométrica o rígida sino creíble, que cuando se quiera representar un motivo vegetal este ya tenga relación con la realidad y se pueda identificar en el campo, así seguiríamos enumerando muchos más ejemplos. Las figuras van a estar cada vez más dotadas de volumen, esta volumetría realza el aspecto naturalista y aleja a la escultura de la plenitud de la plástica románica, de la misma manera desaparecen las deformaciones expresivas del Románico y la isocefalia. En este naturalismo hay que ver la influencia del pensamiento de la época y, dentro de este, a la concepción que del hombre y el mundo tenía San Francisco.

B) La humanización.

Está muy relacionado con la idea anterior. En el Gótico el hombre va a adquirir una importancia mayor que en el Románico, Dios sigue siendo el centro de todo pero el hombre va a cobrar una gran importancia y en la etapa posterior (Renacimiento) va a convertirse en lo más importante. La representación de la figura humana se va a aproximar más al natural, lejos van a quedar ya las representaciones desproporcionadas de la plástica románica. Podemos decir que todo el largo periodo gótico es un largo camino hacia el realismo, hacia la representación perfecta del cuerpo humano, esto se logrará plenamente en el Renacimiento pero la frontera entre las últimas obras góticas y las primeras renacentistas es muy difusa.

C) La independencia del marco arquitectónico.

Si en el Románico todas las obras figurativas (escultura y pintura) estaban subordinadas al marco arquitectónico, en el Gótico la escultura va a adquirir un desarrollo pleno, ya no se tienen que adaptar al espacio que la arquitectura deja, la arquitectura más bien les da realce, a las figuras con frecuencia se les coloca un dosel que no es ni más ni menos que un elemento decorativo arquitectónico para subrayar su importancia. El que no esté la escultura subordinada al fondo arquitectónico no significa que no tenga nada que ver con este, se llega a un equilibrio en el que las dos artes se complementan, pero la escultura tendrá siempre a la arquitectura como referencia. En las portadas la dependencia arquitectónica es mucho más evidente.

D) La antigüedad como fuente de inspiración.

Si ya en el Románico veíamos cómo los contactos con la escultura antigua no se habían perdido totalmente, estos se continúan de una manera más intensa durante el periodo gótico, es decir en este aspecto se produjo un renacimiento de la escultura clásica antes del Renacimiento. Los ideales de naturalismo, belleza, humanismo... son comunes con la estatuaria clásica, así el escultor gótico busca estos modelos clásicos con afán y en algunos lugares su influencia es muy clara como en la Visitación de la fachada principal de Reims en la que los personajes parecen senadores romanos con sus togas, esta influencia clásica será muy intensa en Italia donde los sarcófagos romanos son más abundantes y en escultores como Nicolás Pisano, que trabaja en el siglo XIII, dicha influencia será determinante.



Temática y cambios en la iconografía.

En general siguen siendo válidos casi todos los temas que se daban en la escultura románica pero además de añadir otros nuevos los temas comunes serán tratados de una manera totalmente diferente.
La temática religiosa será también predominante, pero mientras la escultura románica se centraba en el Antiguo Testamento la gótica dará más importancia a los Evangelios y las vidas de los santos. De todas las figuras que aparecen en los Evangelios será la de la Virgen María la predominante, casi todas las iglesias están dedicadas a la Madre de Dios que en esta época goza de un culto predominante, así en casi todas las catedrales suele tener reservada una portada en la que se describen pasajes de su vida. Las figuras de santos van a tener un gran desarrollo, estos son los protectores de la ciudad, de los gremios... la obra La leyenda dorada de Jacopo de la Voragine escrita hacia 1263 y en la que se narran la vida y milagros de los santos más conocidos será la auténtica fuente de inspiración para los escultores góticos. Un tema que perdura del Románico es el del Juicio Final, ahora en el Gótico se va a seguir desarrollando y adquirirá un mayor espíritu narrativo basado en la consecución de detalles mucho más realistas y descriptivos.
Los historiadores del arte pensaban hasta hace unos años que a la hora de decorar las tres fachadas de una catedral los escultores góticos hacían un verdadero programa iconográfico determinando una unidad iconográfica y una unidad temática coherente entre las tres fachadas. Hoy en día se ha llegado a la conclusión que esa unidad no existe ni siquiera en las fachadas, solamente en cada portada hay un programa de conjunto coherente entre las distintas partes. Casi por regla general podemos decir que en un gran número de catedrales la fachada principal se reserva a Jesucristo y al Juicio Final, la Norte a la Virgen y la Sur a los santos.
Si en cuanto a la temática vemos una continuación, con algunas novedades, de la escultura románica, en la manera de realizarse y concebirse la escultura las diferencias son abismales. Los valores estéticos de la plástica románica (antinaturalismo, desproporción, esquematismo, esquemas compositivos simples, plenitud, isocefalia...) fruto de una mentalidad en la que el hombre estaba totalmente subordinado a lo religioso, van a ser sustituidos por la expresión humana de los sentimientos. Si el Cristo románico a pesar de estar crucificado no sufría y aparecía glorioso sobre la cruz, distante del hombre, y no digamos el Pantócrator o Cristo Juez, en el Gótico las figuras religiosas estarán dotadas de sentimiento, el Cristo crucificado sufre, sangra, tiene moratones etc. Si la Virgen románica sólo era el trono en el que se sentaba un Niño ya mayor, en el Gótico hay una relación humana de madre a hijo, la Virgen acaricia a su Hijo, ningún ejemplo es más válido para explicar el cambio de mentalidad entre las dos épocas. En el Románico no importaba la belleza en la representación, contaba sólo la idea religiosa; en el Gótico se representa la idea religiosa por medio de la belleza.
 Junto a los temas religiosos van a aparecer otros distintos. A menudo en la fachada principal en la parte alta aparecen los reyes del Antiguo Testamento, se expresa así una idea política al relacionarlos con los reyes que reinan en ese momento se subraya el poder de éstos y de la monarquía. Además de los reyes van a aparecer a veces los obispos o arzobispos contemporáneos de la catedral, estos se suelen colocar en el parteluz de las portadas, un ejemplo de esto lo tenemos en la catedral de Burgos donde está representado el obispo Mauricio, sobre la aparición de estos obispos haremos una observación, ellos han aportado de manera voluntaria dinero para la construcción de la catedral pero son los canónigos del cabildo los que realmente se encargan de una manera constante de aportar ingresos para la consecución de las obras y de contratar a los constructores, así el mérito no suele ser de los obispos sino del cabildo.
Si en el Románico veíamos que se representaban a menudo monstruos y seres fantásticos, esta temática se va a continuar durante el Gótico y va a adquirir un nuevo impulso, se van a incorporar nuevas fuentes de inspiración como las noticias que de tierras asiáticas traen viajeros como Marco Polo y Benjamín de Tudela, se hacen eco de leyendas y tradiciones chinas o indias donde aparecen hombres con muchos brazos, hombres con la cabeza en el vientre... Estas esculturas así como las que hacen referencia a escenas obscenas se van a colocar en lugares secundarios pero sobre todo en las gárgolas de los desagües que es donde la imaginación del artista trabajará con mayor libertad.



El emplazamiento de la escultura

En general la escultura se sigue colocando en los mismos lugares que en el Románico; en otros casos los lugares y las modalidades escultóricas son totalmente nuevos. Hagamos un estudio de estos lugares.  
La Portada, la colocación de las esculturas en las portadas sigue siendo frecuente y aquí encontramos arquivoltas (ojivales), jambas, dintel, parteluz...como en la época anterior ; pero la distribución es distinta de las portadas románicas, en vez de encontrar el tímpano presidido por el Pantócrator y los tetramorfos este se encuentra dividido en registros horizontales y en ángulo superior se suele colocar la escena del Calvario ; a menudo en el tímpano aparece narrada la vida de la Virgen, esto también es una novedad con respecto al Románico. En las arquivoltas se colocan las esculturas siguiendo la dirección de los arcos y no en sentido radial.
Las fachadas van a recibir esculturas, aunque esto se daba en algunas iglesias románicas (Poitou) ahora en el Gótico se va a convertir en definitivo y algunas fachadas serían impensables sin estas esculturas; recordemos la galería de los Reyes de Reims y de muchas otras catedrales. Estas esculturas no están tan subordinadas al marco arquitectónico como las de las portadas y son más volumétricas.
Los retablos. Aparecerán detrás del altar unos muros decorados con esculturas o pinturas que recibirán el nombre de retablos, estos retablos surgen en el Gótico y se van a desarrollar hasta la época barroca. Normalmente se dividen en sentido vertical en calles y en horizontal en pisos, todo este conjunto se corona normalmente con un calvario, la parte de abajo se llama banco o predela. Retablos famosos en España serán los de Toledo, Sevilla... y adquirirán un gran desarrollo y riqueza a finales del siglo XV.
Sillerías de coro. En las catedrales españolas es normal colocar en medio de la nave central, entre los pies y el crucero, el coro o lugar donde se reúnen los canónigos de la catedral, estos coros se disponen en forma de "U" y en cada lado se colocan los asientos de los canónigos, estos son de madera y en sus respaldos se pueden esculpir relieves que hacen alusión a todo tipo de temas, una sillería famosa será la del coro de la catedral de Toledo. Al igual que los retablos adquieren gran desarrollo a finales del Gótico.
Púlpitos. Son unas plataformas elevadas desde las que los clérigos se dirigen a los fieles, en sus partes laterales suelen aparecer motivos escultóricos. Serán muy típicos en Italia.
Sepulcros. El tema de la muerte obsesionará al hombre de la Baja Edad Media. Aunque ejemplos de sepulcros encontramos desde principios del Gótico, los modelos más acabados serán los del siglo XV. En esencia encontramos dos tipos de sepulcros. Por una parte los sepulcros exentos, se encuentran en medio de las capillas, suelen tener forma prismática y las caras están decoradas con relieves, en la parte superior, en recuerdo del sarcófago romano, el difunto o los difuntos, están representados durmiendo (como El doncel de Sigüenza, el joven difunto aparece leyendo); en algún caso el difunto es llevado por un cortejo fúnebre como en la Tumba de Philippe Pot del Museo del Louvre. Por otra parte tenemos los sepulcros parietales, es decir, los que están en la pared cobijados bajo un arco, un ejemplo acabado es el Sepulcro de D. Alfonso de la Cartuja de Miraflores.
Otros lugares. La lista no se pararía aquí, en general la escultura va a proliferar por todos los lugares de las catedrales, desde las gárgolas hasta los cimborrios o agujas pasando por las torres etc.



Escultura gótica francesa.

El punto de partida de la escultura francesa, que marca el final de la románica y el principio de la gótica se encuentra en el Pórtico Real de Chartres. Los primeros tanteos revelados ya plenamente góticos se realizan en el siglo XII en las catedrales de Sens y Senlis, en ésta última aparece la primera portada dedicada a la Virgen. Pero los grandes conjuntos escultóricos pertenecen al siglo XIII y en ellos se advierte cómo el Pantócrator románico da paso al Cristo Maestro, de expresión más humana y bondadosa, al tiempo que la Virgen ocupa cada vez lugar más destacado en los programas iconográficos. Así ocurre en el crucero de la catedral de Chartres, en la muy restaurada serie de portales de Nôtre-Dame de París, en la catedral de Amiens (aprox. 1235), con figuras de gran belleza como el célebre Beau Dieu de la portada principal o la Virgen Dorada del lado sur del crucero; y en la catedral de Reims, en cuyas esculturas, posteriores a 1250, se aprecia la intervención de diversos maestros como el que realizó el grupo de la Anunciación, cuyo arcángel muestra una abierta sonrisa, o el de la Visitación, en el que late el eco del mundo clásico, no en vano su realizador era conocido como maestro de las esculturas antiguas.
Durante el siglo XIV, la escultura francesa dio paso al alargamiento y acusada curvatura de las imágenes con mantos de abundantes plegados curvilíneos, configurando una especie de “manierismo gótico” cuya mejor expresión son las piezas de marfil producidas por los talleres parisinos.
A fines del siglo XIV y principios del siglo XV surgió en Borgoña un estilo pleno de realismo en la captación de rostros y objetos que habría de extenderse por toda Europa en el siglo siguiente. Su introductor fue Claus Sluter, autor del llamado Pozo de Moisés (1395-1401) en la cartuja de Dijo, en el que aparecen unos profetas de intenso realismo. También Sluter fue el creador de un tipo de sepulcro exento que tendría gran difusión, con la figura yacente del difunto y en los laterales diversas plañideras y encapuchados, conforme se observa en el sepulcro del duque Felipe el Atrevido en Dijon, cuyo modelo se continúa en el de Philip Pot del Museo del Louvre, realizado hacia 1485 por Antoine Le Moiturier. Con las obras de Sluter y sus seguidores el arte gótico culmina el largo camino hacia el realismo, de ahí al Renacimiento sólo hay un paso.




Escultura gótica española.

A)   El gótico inicial: segunda mitad del siglo XII y primera mitad del XIII

En el tema anterior, al tratar la evolución de la escultura románica española, hablábamos del Pórtico de la Gloria de Santiago de Compostela como el final de esta escultura románica, ese final, por otra parte es también el inicio de la escultura gótica ya que el citado pórtico tiene características de los dos estilos al tratarse de una obra de transición. Junto al Pórtico de la Gloria se dan otras obras con las mismas características de pertenecer al periodo de transición entre el románico y el gótico: las esculturas de San Vicente de Ávila y el apostolado de la Cámara Santa de Oviedo entre otras. Ya de la primera mitad del siglo XIII tenemos obras plenamente góticas realizadas bajo influjo francés: la portada occidental de la catedral de Ciudad Rodrigo y la portada de la colegiata de la ciudad de Toro. En ambos casos se representa el tema de la pasión y escenas de la vida de Cristo.

B)    La escultura gótica de la segunda mitad del siglo XIII.

Es la etapa del gótico llamado clásico, la influencia francesa en esta época es importante y coincide con la construcción de las grandes catedrales castellanas del siglo XIII.
En Burgos trabaja el maestro Enrique que realiza la Puerta del Sarmental (puerta sur de la catedral) ya casi a mediados de siglo. En el tímpano aparece un tema románico típico: el Pantócrator y los evangelistas pero el tratamiento es ya propio del gótico, los evangelistas están representados como hombres que escriben en sus pupitres. En el parteluz se encuentra la imagen de San Indalecio. Todo este conjunto se cree que está influido por la escultura de la catedral de Amiens. La puerta norte o de la Coronería representa un Juicio Final y debido a la desigual calidad de las esculturas deducimos la participación de dos maestros distintos. Otra puerta importante es la que daba acceso al claustro, de hacia 1270, conserva todavía la policromía original y el de destacar la Anunciación de las jambas del lado izquierdo. Otras esculturas de la época que destacan en la catedral de Burgos son la representación de Alfonso X y su mujer doña Violante. Sin salir de Burgos hemos de destacar en el monasterio de las Huelgas el sepulcro de Alfonso VIII y Leonor de Aquitania, de gran originalidad y que guardan relación con los de la iglesia de Santa María en Villalcázar de Sirga (Palencia).
En León encontramos en la portada principal de su catedral una escultura que tiene relación con la burgalesa. En la puerta central de la fachada occidental está representado el tema de la deésis: Jesucristo resucitado enseñando las manos con las huellas de los clavos rodeado de ángeles que portan la lanza y otros símbolos de la Pasión; en los extremos la Virgen y San Juan contemplan el acontecimiento. Debajo, en el registro inferior un Juicio Final con la representación detallada del Paraíso y del Infierno, es la derivación de un viejo tema románico tratado bajo la estética gótica. En la misma puerta central encontramos en el parteluz la imagen de la Virgen Blanca, realizada por el mismo maestro que trabajo en Burgos en la puerta de la Coronería. Fuera de Castilla y León destaca la imagen de la Virgen Blanca en el parteluz de la catedral de Tarragona que es un precedente del ritmo curvo que adquieren las esculturas del XIV, su autor el maestro Bartomeu que también trabajó en Gerona.





C)   La escultura gótica en el siglo XIV.

En el siglo XIV llegamos a una manera muy peculiar a la hora de representar las figuras: los personajes describen una acusada curvatura, las figuras presentan una sonrisa un tanto irreal, se describen los detalles secundarios y anecdóticos, se destaca la abundancia de pliegues...
En Castilla destacan dos escuelas: Toledo y Vitoria; también serán centros importantes Cataluña y Navarra.
En Toledo se rematan algunas fachadas que no se habían completado en el siglo anterior. Es de destacar la Puerta del Reloj, su tímpano está dividido en varios niveles que tratan sobre la pasión de Cristo y en el remate de éste la muerte de la Virgen. La Puerta del Perdón se realiza ya a principios del siglo XV. Quizá la obra más representativa del gótico del siglo XIV sea la Virgen Blanca de la catedral de Toledo  obra policromada que se conserva en el coro de la catedral, es una síntesis de todas las características que hemos presentado.
En Vitoria destaca la portada de Santa María, donde se representan escenas de la vida de Jesucristo y de la Virgen. También en la misma ciudad destaca la portada de la iglesia de San Pedro con escenas de la vida de ese santo.
En Navarra destacan las esculturas de la catedral de Pamplona, especialmente la llamada Puerta Preciosa dedicada a la Virgen. Otra puerta a destacar es la de la Virgen del Amparo donde se recoge la influencia de la escultura alemana.
Cataluña conserva una importante muestra de la escultura del XIV que se manifiesta en todos los géneros, desde los relieves de la Urna de Santa Eulalia en la cripta de la catedral de Barcelona, hasta sepulcros en piedra de los reyes en el monasterio de Poblet, pasando por los retablos también en piedra. Destaca la labor de Jaume Cascalls que realiza los más importantes sepulcros reales de Poblet y la estatua de Pedro IV en la catedral de Gerona.

D)   La escultura gótica en el siglo XV.

En el siglo XV la producción es abundantísima, a España llegan influencias de los principales núcleos productores de la Europa del momento: a principios la escultura estará bajo el influjo borgoñón (recordemos las formas realistas de Sluter en el Pozo de Moisés), influjo que será sustituido en una segunda etapa por el flamenco y el germánico. De todas formas la consecución del realismo es la nota dominante de la escultura del XV y la escultura española pasa por su mejor momento.
En Pamplona destaca el monumental sepulcro de Carlos III el Noble y su mujer Leonor de Castilla realizado por Janin de Lomme, en esta obra se nota el poderoso influjo de la escultura borgoñona del momento, está inspirado en la tumba de Felipe el Atrevido hecha por el propio Sluter.
En los reinos de la Corona de Aragón (Cataluña, Aragón Baleares y Valencia) hemos de destacar la figura de Guillem Sagrera representante en la zona de la corriente borgoñona, sus obras más importante son el San Pedro de la puerta del Mirador de la catedral de Palma y el Ángel de la puerta de la lonja de Palma. En Cataluña destacará la figura de Pere Joan, autor del famoso San Jorge del palacio de la Generalitat y el retablo de la catedral de Tarragona. Otros autores de menos importancia que también trabajan en la zona son: Pedro Oller, Pedro Sa Anglada y Hans de Suabia.
En la Corona de Castilla vemos al principio la influencia borgoñona que dura hasta mediados de siglo, y más tarde la flamenca que se desarrolla en la segunda mitad en tres núcleos importantes: Sevilla, Toledo y Burgos. De la influencia borgoñona encontramos el ejemplo más acabado en la tumba del cardenal Anaya en la catedral vieja de Salamanca.
En la segunda mitad destaca el núcleo sevillano con autores como Lorenzo Mercadante de Bretaña que asume el estilo flamenco y deja en el sepulcro del cardenal Cervantes un realismo patético. El núcleo toledano lo inicia Egas Cueman con obras como el sepulcro de los Velasco en el monasterio de Guadalupe, la sillería de la colegiata de Belmonte (al principio proyectada para Cuenca), y algunas esculturas en la puerta de los Leones y en San Juan de los Reyes.
Importante será también la labor de Sebastián de Almonacid, autor de los sepulcros de la Capilla de D. Álvaro de Luna en la catedral toledana y la tumba parietal de Martín Vázquez de Arce, más conocido como el Doncel de Sigüenza por encontrarse en la catedral de Sigüenza (Guadalajara), esta es su obra más importante; obras de este maestro se localizan también en Ávila y Segovia. Ya a finales del siglo trabaja en Toledo Rodrigo Alemán con la sillería del coro de la catedral de Toledo donde en los respaldos representa escenas de la Guerra de Granada con la representación de las distintas ciudades. De gran importancia será la labor desarrollada por el núcleo burgalés que equivale a decir Gil de Siloé, el autor más destacado y que eclipsa a sus contemporáneos. Desarrolla su producción entre 1483 y 1500. Importante es su retablo de Santa Ana en la catedral de León. Pero como retablista su obra más destacada es el retablo de la cartuja de Miraflores, un retablo espectacular influido por lo germánico, un gran medallón central y otros en su interior y en el exterior hacen alusión a diversos misterios religiosos. En la misma cartuja realiza el sepulcro exento en forma de estrella de Juan II e Isabel de Portugal, obra de una gran calidad técnica, como es usual en él, el material utilizado es el alabastro. Sin salir de la cartuja de Miraflores encontramos otro sepulcro, esta vez parietal, el del príncipe don Alfonso, hijo de los anteriores y hermano de Isabel la Católica, en esta obra el detallismo en la representación es insuperable.


''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''





No hay comentarios:

Publicar un comentario

https://www.flagsonline.it/es/asociacion-nacional-de-partisanos Nuestra Historia La ANPI, Asociación Nacional de Partisanos Italianos, ...